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Extracto:El dólar ha abierto la semana al alza con un nuevo brote de aversión al riesgo a escala mundial, ya que los datos indican que la economía china se ha desacelerado más de lo esperado en el tercer trimestre.
El dólar ha abierto la semana al alza con un nuevo brote de aversión al riesgo a escala mundial, ya que los datos indican que la economía china se ha desacelerado más de lo esperado en el tercer trimestre.
A las 9:00 horas (CET), el índice dólar, que sigue la evolución de esta moneda con respecto a una cesta de otras seis divisas principales, sube un 0,2% hasta 94,15, registrando su mayor subida frente a las monedas vinculadas a las materias primas como el dólar australiano, y frente al won coreano.
Las cifras procedentes de Pekín han indicado que el crecimiento del producto interior bruto se ha ralentizado hasta situarse en sólo un 4,9% en el trimestre, gracias a una ola de la variante Delta del Covid-19 que ha obligado al país a implementar duras medidas de confinamiento desde principios de 2020.
El gobernador del Banco Popular de China ha dicho que los riesgos derivados de la desaceleración son controlables, pero las cifras han provocado una nueva inquietud, pues los inversores siguen muy pendientes de la actual crisis crediticia del sector inmobiliario, que representa una parte de la inversión empresarial mayor que cualquier otra de la segunda economía del mundo.
Los analistas de Nordea (ST:NDASE) señalaron en una nota a sus clientes que China sigue camino de cumplir su objetivo oficial de crecimiento del 6% para todo el año, gracias a los suaves efectos de base y a un fuerte primer semestre.
“Sin embargo, no se espera que los motivos de este mal rendimiento desaparezcan en un futuro próximo y hay muchos riesgos a la baja para las previsiones de crecimiento de cara a 2022”, dice el analista Tuuli Koivu.
A las 9:00 horas (CET), el dólar se situaba en 6,4360 yuanes, sin apenas cambios con respecto al cierre del viernes, en una continuación de un patrón que sugiere que el Banco Popular de China va a permitir poca o ninguna flexibilidad en el tipo de cambio en un momento de elevada incertidumbre.
En Europa, el fortalecimiento del dólar ha impedido que la libra esterlina suba bastante tras las agresivas declaraciones del gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, sobre la inflación.
Bailey dijo el miércoles ante una serie de banqueros centrales que la subida de los precios de la energía significa que el repunte de la inflación este año probablemente dure más de lo previsto, y que el Banco “tendrá que actuar” para mantener bajo control las expectativas de inflación. El par GBP/USD se deja un 0,1% hasta 1,3738 dólares, pero la libra avanza frente al euro hasta 1,1866, alcanzando máximos de 21 meses.
El euro sigue sometido a una gran presión, ya que es una de las pocas divisas importantes cuyo banco central sigue empeñado en no ajustar la política monetaria. A las 9:00 horas (CET), el par EUR/USD se situaba en 1,1578 dólares, un 0,2% por debajo del cierre del viernes.
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