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Extracto:Aquellos años en los que existía el marco, la peseta, la lira, el florín, el franco… y tantas otras monedas
Como cambista (trader) de la vieja guardia, tuve la oportunidad de vivir un mundo muy distinto al que hoy tenemos, en los mercados de cambios.
En ese mundo, existían divisas que hoy ya son recuerdo pero que nos enseñaron a muchos de los cambistas de entonces a conocer el mercado tan ampliamente que muchos de ellos se especializaron y otros dieron el salto a instancias diferentes del mercado pero que no podrían haberlo hecho sin la experiencia previa.
Hoy día la moneda común europea, el euro, es la divisa de 19 países de la llamada Unión Europea, pero esas naciones tenían su propia divisa hace muchos años y cada moneda tenía sus características muy peculiares, sin olvidar desde luego que unas eran más relevantes que otras, como siempre sucede en el mundo de las divisas nos guste o no. Dicha relevancia depende desde luego de la importancia de cada economía.
El “rey de Europa”
El marco alemán era conocido como “el rey de Europa”, junto con la libra esterlina (que todavía existe), y en menor medida el franco francés, determinaba mucho de lo que sucedía en ese mundo de divisas del último cuarto del siglo pasado.
La influyente economía alemana ya era para entonces la quinta más importante del planeta y su influencia en toda Europa era innegable.
Además, otras naciones de la región enfrentaron por aquellos años crisis económicas y financieras importantes que profundizaron la relevancia del marco alemán. Por ejemplo, España tuvo una fuerte crisis junto con Italia.
La forma de operar era muy similar a la actual; de hecho, los cruces de divisas más importantes en el mundo en ese entonces eran el de dólar-marco y dólar-libra o viceversa.
Desde luego todo lo que pasara en las respectivas economías era de capital importancia para nosotros los cambistas o traders, con la diferencia de que no existían los adelantos tecnológicos actuales y las fuentes de información tenían muchas horas de diferencia, incluso en ocasiones eran días completos.
Después del llamado “rey de Europa” y de la libra esterlina, una divisa asiática también dominaba el escenario, el yen japonés, ya que por entonces Japón era considerada la segunda economía del planeta, sitio que ahora ocupa China.
Era tanta la relevancia de los tres cruces anteriores, que no en pocas instituciones financieras había cambistas o traders especializados en alguno de ellos, así había un cambista especializado en el dólar-marzo, otro en el dólar-yen y otro en el dólar-libra, aunque también los había en otras monedas.
Desde luego no había un mercado de Forex tan desarrollado porque como dije líneas arriba, el desarrollo tecnológico todavía no “explotaba” como lo hizo años después.
Pero fue un mundo que nos enseñó a muchas generaciones de cambistas s conocer los “secretos” del oficio, que nos hizo analíticos, que nos enseñó una forma de trabajar.
Para muchos cambistas, yo incluido, este mercado fue la base de nuestra formación profesional.
Nada ha cambiado
En retrospectiva, las bases del mercado siguen siendo las mismas. Indudablemente hoy es un mundo muy distinto porque las cotizaciones se conocen no solamente en tiempo real sino por todo el que quiera conocerlas, en mi época era un privilegio de pocos, prácticamente sólo de quienes estábamos dentro del mercado.
Hoy ya no existe el marco alemán, ni la libra esterlina o el franco francés, pero las bases del análisis y del trading siguen siendo las mismas, es igual de apasionante operar con el euro, aunque fue complicado para muchos de nosotros dejar la costumbre de cotizar los cruces que nos dieron las bases de nuestro desarrollo profesional.
Lo que les puedo compartir a los cambistas de hoy día es que nunca pierdan la capacidad de análisis, el amor por el mercado y su relevancia en nuestro mundo. Quizás con el paso de los años alguno de ustedes escribirá un texto en el que reseñen la época en la que existían monedas que para entonces ya no, nadie sabe el futuro.
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*La moneda mexicana tiene una apreciación ficticia que no ayuda en nada, al final estos fenómenos siempre se corrigen.
*Así como el mundo se ha vuelto adicto a la liquidez de los bancos centrales, también depende mucho de las tasas demasiado bajas
*La mayor economía de la región tiene problemas muy similares a los del resto del mundo, pero en un país tan grande estos se magnifican, además de que no nacieron con la pandemia
*Algunas tesis nos podrían dar pistas sobre lo que pasa, así como posibles soluciones para evitar colapsos posteriores o cuando menos diferirlos en el tiempo